En 1928, Leocadia adquirió terrenos lindantes alcanzando las 11
hectáreas. Por esos años se hicieron los primeros loteos, dando origen al Barrio
Seré.
Por razones no establecidas, la Mansión fue vendida al Municipio
de la Ciudad de Buenos Aires en 1949, por una suma cercana a los tres millones
de pesos (llamados "pesos moneda nacional"). Luego de la caída
de Perón, la
propiedad fue virtualmente abandonada hasta 1966.
Durante la presidencia de facto de Juan Carlos Onganía en 1966, el lugar fue
habilitado como Casino de Oficiales de la VII Brigada Aérea de Morón,
iniciándose así, la presencia militar en la zona.
Tras el golpe de 1976, entre
1977 y 1978, el lugar funcionó como centro clandestino de detención bajo la
jurisdicción de la Fuerza Aérea con asistencia de la Policía Bonaerense de
Castelar. En la jerga de los represores era conocido como "Atila" o
"La Mansión".
A pesar de los estrictos controles y vigilancia a que estaban
sometidos los prisioneros alojados en la casona, una fuga fue posible y con
ello el principio del fin para este Centro Clandestino de
Detención.
El 24 de marzo de 1978, en coincidencia con el segundo
aniversario del golpe militar, el futbolista Claudio Tamburrini, Daniel
Rusomano, Guillermo Fernández y Carlos García Muñoz lograron evadirse
descolgándose desnudos y esposados desde una ventana del primer piso.
Estos
hechos son recreados en la película Crónica de una fuga, del director de cine Adrián
Caetano del año 2006.
Tras la fuga, la Mansión fue incendiada y dinamitada, quedando
de ella sólo una ya inestable fachada y los prisioneros enviados a varias
unidades penales.
En 1985, recientemente recuperada la democracia, el
intendente de Morón Norberto García Silva gestiona
ante la Municipalidad de Buenos Aires la recuperación del predio mediante un
comodato por diez años a la Municipalidad de Morón, para que fuera destinado a
la construcción un Polideportivo, llamado "Gorki Grana".
El día de la
inauguración, el Intendente afirmó: "Donde hubo tinieblas, ahora debe
brotar vida".
Las ruinas de Mansión Seré fueron demolidas en el marco de la
construcción del Polideportivo. En el año 2002, a través del Proyecto
Arqueológico y Antropológico Mansión Seré, se comenzaron excavaciones que
lograron recuperar los cimientos y construir un Sitio de Memoria de relevancia
nacional e internacional.
Aquí termina el paseo por el tercer circuito de la Reserva Natural Urbana de Morón. Pueden ver en el anterior post el primero dedicado a recobrar la Naturaleza del lugar y el segungo a Recreación para los visitantes.
Desde luego no quise dejar de ponerlo, pues la memoria de nuestros antepasados, sus luchas por la Libertad y la Democracia tiene que servir para sostener esta idea.
Despierto en la madrugada de este domingo en Chile, RosaMaría, con tu dramática historia en el primer lugar de mi lista de blogs amigos. La verdad es que aunque muchas veces se diga lo mismo, es válido aquello que la realidad supera la ficción como argumento fílmico.
ResponderBorrarUn beso.
Cómo se pone la lista de blogs amigos y sus entradas? tienes que enseñarme, por aquí nadie maneja blogs así que recurro a mi vecino... La dramática historia no escapó a ninguno de nosotros. Me resultó doloroso visitarlo, pero vi los tres circuitos y éste estaba al final. Aún así, fue una gesta para algunos, especialmente quienes pudieron contarlo y describirlo como para hacer esa película que veré hoy. No me regodeo en el pasado pero tampoco olvido. Gracias por tu visita. Abrazo
ResponderBorrarTriste final para la casona y tristes todos los acontecimientos en los que ha estado ligada.Besicos
ResponderBorrarCHARO:Terribles acontecimientos, duros momentos de mi querida patria. Vi la película y realmente se queda corta con todo lo acontecido.Gracias por venir. Besos
ResponderBorrarEs muy emocionante el hecho de la fuga de esos cuatro hombres desnudos y encadenados. Se me han puesto los pelos de punta, ya sabes es un modo de hablar, debí decir que sentí escalofríos porque lo asocié a las atrocidades de las que hemos oido hablar, con mucha frecuencia en los medios, y la reflexión es siempre la misma. se busca que el terror acabe con la resistencia de los hombres, y se llega a matar, todo está justificado para sostener el poder y la opresión. Es un acierto que un lugar tan tenebroso se haya convertido en un lugar de esparcimiento y disfrute para todos.
ResponderBorrarGracias por la información tan detallada que nos presentas de la historia del lugar. Has realizado un buen trabajo. Gracias por compartirlo. Un abrazo.
No he podido publicar mi comentario en tu blog porque se bloquea o a mí se me ha bloqueado. Te lo dejo de un modo temporal, mañana vendré, lo copiaré y lo pondré en su lugar ¿? Espero que no te sirva de molestia.
ResponderBorrarLos problemas de salud son inherentes al paso de los años. Y es, o suele ser una regla que falla pocas veces, la cantidad de años es desproporcional a la fuerza: cuanto menor es la fuerza, mayor es la cantidad de achaques que hay que acarrear y los kilos, aparte.
Todas tus sugerencias están -como decimos los hispanos- cargadas de razón y de buen sentido común. Buscar la grata compañía, tratar de reír todos los días, abrazar a alguien con cariño, no irse a la cama sin tener algo importante que hacer al día siguiente, aprender cosas, quizás, lo más importante sea que no nos agobie nuestra propia compañia, saber encontrar el sentido que tiene todo lo que forma parte de nuestra vida y mirar siempre el lado positivo.
Un abrazo con todo mi afecto y admiración.
FRANZISKA: querida amiga, no imaginé que vieras la película... es parcial pues sólo es el relato del jugador de fùtbol, uno de los más fuertes y observadores, tampoco está muy bien actuada, pero ese no es el tema en cuestión. Gracias por tu comentario. Besos.
ResponderBorrarFRANZISKA: No hace falta que lo copies, es tan sabroso lo que pnestanto por aquí como por el otro que agrega y enriquece siempre como todas tus reflexiones. gracias por tu molestia. Te quiero amiga, que sigas bien y con proyectos. beso
ResponderBorrarNo aguanto ya esas atrocidades.
ResponderBorrarNo puedo soportarlas.
Me deprime hasta la náusea comprobar una vez más la crueldad de los humanos.
Pero también es cierto que hay que evitar que la desmemoria lo tape todo.
Recuerdo una visita a un campo de concentración nazi... ufffffffff... no puedo olvidar lo que vi allí...
Es horror de los horrores.
A medida que voy cumpliendo años tengo menos defensas emocionales.
Besos.
TORO SALVAJE: me pasa un poco lo mismo, vi la película y quedé shokeada considerando que no refleja todo lo que pasó... En cuanto a las defensas emocionales, es cuasi normal que nos suceda, a mí mucho y cotidianamente pero trato de reforzarlas, lamento mi invasión a tu espíritu... Besos amigo y gracias por venir
ResponderBorrarVuelvo para comentarte que hoy tampoco he conseguido dejar un comentario en Los relatos de Rosa María Favale. Creo que el problema lo está generando Google. Lo siento. Un abrazo.
ResponderBorrarBeso y agradecida por tu molestia. Te quiero amiga.
BorrarMe gusta esa frase: Donde hubo tinieblas, ahora debe brotar vida. Es una forma de no olvidar el pasado, de rendir homenaje a los que lucharon por la libertad y, al mismo tiempo, de sentar las bases para el presente y el futuro.
ResponderBorrarTAWAKI: Es bien cierto, aunque recorrer, revivir y fotografiar fue importante para mí, me hace ver que poco cambia en el mundo y se repiten estas atrocidades, tal vez en otra forma, pero horribles también. Hay gobernantes que sacan sus peores facetas y con otros métodos someten a los pueblos a formas degradantes de vivir, huir, trabajar y hasta morir. Gracias por venir. Abrazo.
ResponderBorrarCuanto tenemos que agradecer a todos los que han luchado y luchan por la libertad y la democracia. Se abanza muy despacio pues con forme va pasando el tiempo vemos que siempre hay personas que atentan contra los derechos que poco a poco se han conseguido. Hay que estar atento@s y procurar que no logre nadie el retroceso.
ResponderBorrarUn abrazo querida amiga.