Accedo al Parque Rivadavia por una de sus entradas, que dada su extensión son varias..
Dejo aquí el enlace para no extenderme en explicaciones pues son muchas fotos:
http://es.wikipedia.org/wiki/Parque_Rivadavia
Esta foto está tomada hacia Rivadavia
El sector de juegos infantiles muy prolijo y bien cuidado... Al ver la foto con más detenimiento me llamó la atención la actitud pensante o tal vez cansada del papá de la niña... ¿O estaría agobiado por el calor?
Pocos se dedican al arte, pero aquí hay una artista que está absolutamente abstraída en su pintura.
Aquí se pueden observar los baños que están implementados en varios sectores del Parque.
Y giramos para ver el sector del solarium.
Por supuesto que sombrillas y reposeras se alquilan, vemos en la foto anterior al encargado caminando y controlando, además de acomodar y cobrar.
Ahora miramos hacia la izquierda y seguimos viendo más de lo mismo.
Otra vez sigo por el lateral de la calle Rosario, que está paralela a Rivadavia.
No puedo dejar de mostrarles este hermoso Palo Borracho en flor.
Lástima tener de fondo los baños, pero es muy bella y delicada.
Y llegamos al lugar de los niños nuevamente... De buena gana hubiera dado una vuelta en ella.
Y aquí lo que no quisiéramos ver pero que es parte de la realidad en cualquier ciudad del mundo.
Y ya saliendo por ese lateral, (aunque volveré a entrar cuando termine este recorrido), está la feria de libros usados de todo tipo, revistas antiguas de lo que deseen, CD, discos, y hasta pequeños juguetes, todo un mundo que nos lleva a otras épocas. Aunque también se encuentran libros de textos vigentes.
Hacia la mitad ven otra entrada que comunica al parque, pero sigo hasta Rivadavia para volver a entrar.
La estatua de La Madre y a la izquierda el puesto sanitario donde me tomé la tensión: 10-- 6--
Un poco baja pero recurro a mi botellita de agua y sigo...
A un costado, este elemento del que algunos se sirven no precisamente para los "regalitos" de los perros.
Sepan disculpar ese dedito inquieto que se coló por allí arriba...
Y salimos, aunque faltó mucho por ver, pero ya "abonda" como se dice en Coruña.
En la calle Rivadavia nuevamente nos encontramos con los "manteros" o "artesanos", como se quiera llamar, pues nada es hecho manualmente, pero hay que sobrevivir, ¿Verdad?
Ni el lateral de la escuela se salva
¿Qué están cansados?
Bueno, ya estamos, terminó el paseo.
¡No me digan que tuvieron calor!
¿Qué son 40°?
Pues "Nunca llueve a gusto de todos"
Será hasta la próxima, junten fuerzas que yo me voy de vacaciones.
¡Hasta la vuelta amigos!