Histórico mercado gastronómico situado en
pleno barrio de Caballito. Cuenta con dos entradas por la calle Rivadavia (a la
derecha de la foto) y una por la calle
Centenera, a la izquierda.Justo en frente se encuentra la estación
Primera Junta del subterráneo de la línea A.
Sentada en la cafetería situada al lado de
una de las entradas por la calle Rivadavia observo el ir y venir de gente y me
dispongo a sacar varias fotos.
Fue construido por la Sociedad de Progreso
de Caballito a iniciativa del entonces presidente Juárez Celman e inaugurado el
9 de Noviembre de 1889
En 2001 fue declarado sitio de interés
Cultural por el Gobierno de la Ciudad.
La entrada ya ofrece tentadores frutos
secos y conservas
En una
de las paredes vemos estas mayólicas
En el
sector de plantas se presentó un problema: El señor de la foto dice que está
prohibido fotografiar el mercado…
Desde el
fondo hacia la entrada vemos.
Sigo sacando con cuidado y apuro para que
no me vea. No entiendo porqué no puedo sacar fotos.
El sector de embutidos
y pescados.
Chacinados
y quesos de primera calidad.
Fue construido al estilo de París con
grandes espacios libres. En el centro carnes, chacinados y cerdo para mejor
ventilación.
En su momento los puestos los ocupaban
trabajadores inmigrantes que luego pasaron a ser dueños siguiendo sus
descendientes, más de 60 nietos y bisnietos de los primeros propietarios.
Se reformó en 1894 y el 13 de enero don
Santiago Cangallo que era su propietario, comunicó que los viernes ofrecería
carne a las familias indigentes. Gesto que lo honró ante sus vecinos.
Harinas frutos secos y legumbres .
Entre 1929 y 1930 se reformó la fachada
incorporando un reloj y el nombre en estilo Ar Decó.
Todos los productos, tanto nacionales como
importados, son de primera calidad cosa que lógicamente repercute en el precio,
pero ya sabemos que al ser los mejores como en cualquier lugar el precio tiene
diferencia.
Hay un puesto de cuadros iluminados.
Papas y leña, no falta nada para un buen
asado, ensalada, frutas o postres.
Se venden verduras de primera calidad…
El Mercado cuenta con 17 negocios a la
calle y 174 puestos interiores distribuidos en 3600 m2.
Dato curioso:
El escritor Roberto Arlt ambientó su
novela “El juguete rabioso” (que recomiendo) en el Mercado del Progreso en el
que el protagonista de la novela recorre los puestos de carne y pescado
vendiendo papel de diario para envolver los productos.